sábado, 24 de noviembre de 2012

El Tercer Mundo.






Húmedo. Todo estaba completamente húmedo y en completa oscuridad, salir de este lugar será como escapar del mismísimo infierno.




Era viernes por la mañana y estaba a punto de salir con Jake, a emprender la excursión que tanto habíamos planeado estos tres meses. Habíamos decidido irnos a explorar la selva de la Península de Yucatan, investigamos y supimos de una reserva llamada "Sian Ka´aan". Ambos somos buenos guías y hemos hecho varios viajes a distintos lugares en todo el mundo. El pasado, nos fuimos a la región de los Andes en Chile y Perú, y escalamos las mas majestuosas montañas que hemos visto en nuestra vida.
Jake es mi mejor amigo en todo el mundo. Lo conozco desde mis años de adolescente en la preparatoria y siempre fuimos muy unidos, compartimos muchas cosas y nos relacionamos de manera grandiosa. Ambos somos Turistologos y nos apasiona la rama Eco-Turística de nuestra carrera. Yo por mi parte he tomado cursos de Espeleología y se mucho de cuevas, él es mas ecológico y prefiere aquellas cosas que ayuden a conservar el planeta.
Nuestro viaje a la reserva fue idea de Jake, debido que deseaba mucho investigar sobre la vida silvestre de este lugar. Así que sin mas nos, ese viernes nos levantamos ambos de nuestras camas sin saber lo que habría de suceder en el transcurso de este viaje.
Ese día pasé por Jake a su casa temprano, a las 4:00 a.m. La reserva queda aproximadamente a unas tres horas desde donde vivimos, en la ciudad de Cancun. Cuando llegue a su casa, él esperaba ansioso; este viaje lo deseaba desde su cumpleaños pasado. Toqué la bocina de la camioneta y a los pocos minutos su rostro sonriente me saludo desde la puerta con vitrales de colores y forma exótica en la entrada de su casa.e colores y forma exótica en la entrada de su casa.

- ¿Ya listo para la aventura?
- He estado listo desde que lo planeamos, Chris.
- ¡Eso me anima! Pues no se diga mas, pon tu maleta en la parte de atrás y emprendamos el viaje a lo desconocido, hermano.



Abrió la cajuela de la camioneta y deposito en ella su maleta camuflajeada que imitaba las hojas secas y verdes de la selva, muy parecida a la de un soldado. Subió al asiento de co-piloto y con una bendición emprendimos el viaje a la reserva.
Durante el recorrido, platicamos sobre como empezaríamos el campamento, donde nos asentaríamos y cual sería el lugar mas estratégico para establecer nuestras casas. Nos reímos de las experiencias pasadas y de los chascos que vivimos en muchas ocasiones. Como por ejemplo; en uno de nuestros viajes de excursión a Asia no supimos como pedir nos orientaran para llegar a una zona de lagos y cerezos que, según amigos que ya habían ido ahí, era muy hermosa y excelente para quedarse varias noches. Nos sucedió que el intento de llegar, perdimos el rumbo y no supimos con exactitud donde estábamos  así que solicitamos a un residente que nos pudiera orientar. Mi mandarín es pésimo y solo se decir palabras básicas como comer, agua, hola, adiós entre otras; pero Jake habla un poco mas fluido este idioma. El caso es que el hombre al cual nos dirigimos  jamas en su vida había visto turistas en cerca de su localidad, y por lo tanto el poder entendernos le era aún mas difícil. Tuvimos que hacer uso del poco conocimiento de Pantomima que teníamos y con expresiones y señales intentamos decirle a donde queríamos ir. Al final de cuentas logro comprender lo que queríamos y nos llevo hasta el lugar. El lago de "Tzun-Shiu" era la cosa mas grandiosa que jamas habíamos visto.
Estaba completamente rodeado por cerezos y Sakuras que simplemente hacían mágico al lugar. Nos sentimos tan satisfechos de haber llegado, que el hecho de no saber suficiente mandarín  se volvió relativo al momento de charlar con el hombre que nos llevo hasta el lugar, y quien ademas, se ofreció para recibirnos en su casa esa noche. El nombre de aquel buen caballero era Lee Chan; un anciano de la región.

Aceptamos la invitación sin ningún problema, y junto a Jake pase una de las mejores semanas de mi vida en ese lugar. Alejados de todo contacto con el mundo globalizado y fuera del alcance de los problemas que la modernidad arrastra. Fue uno de los momentos mas plenos de mi vida y ahora, otra aventura nos esperaba en Sian Ka´aan.

Pasamos dos horas en la autopista y por fin llegamos al pequeño pueblo de Tulúm. Recargamos el tanque de gasolina una vez mas, fuimos a un supermercado por provisiones y material básico y, una vez que las cosas estaban completamente listas, nos montamos en el auto y penetramos la selva por el sendero de terraseria que conectaba la civilización con la naturaleza.

Pasamos varios hoteles, previa nuestra llegada al Arco, la entrada oficial a Sian Ka´ann. El lugar era asombroso  Por un lado, estaba un inmenso bosque de palmeras que se extendía desde varios kilómetros antes del arco, y se extendía un mundo de palmeras frente a nosotros que parecía no tener fin. El panorama, el paisaje tropical era hermoso. Podíamos ver infinidad de animales pasar por en medio del camino, aves de todos los colores que se pueden imaginar, insectos tan extraños y hermosos que, pensaríais que son hadas del bosque acechando vuestra mirada. Flores soberbias y un cielo mas que imponente, azul a mas no poder, con un sol que imponía respeto y fuerza. Poder en su máxima expresión.

A un lado nuestro estaba una misteriosa laguna, llena de secretos y criaturas tímidas. Jake comenzó a bromear conmigo, dijo que quizá y si teníamos suficiente suerte, una Sirena o una Ninfa se nos presentaría en la mitad de la noche y nos haría el día. Tendríamos la maldición del placer corriendo todas las raíces de sangre que sostienen nuestro cuerpo, como escarlatas de vida implorando calor ajeno.

Yo solté una carcajada mas que exagerada, por lo regular Jake siempre decía payasadas. No era una persona muy seria
- Eres un completo idiota. Si una sirena tuviera sexo contigo, seria para después matarte y devorarte sin piedad, y por el contrario, si una ninfa decidiera acostarse contigo, tendría que ser porque le pareciste demasiado hermoso, que le causaría dolor a su alma en no tenerte; para después arrancarte la vida con un suspiro. Así que, ¿ahora crees que es divertido tener sexo con seres del reino de la hadas mi estimado Jake
- Seria demasiado candente poder tener sexo con un ser mágico. Mas con una Ninfa del agua. Me volvería un dios si pudiera saborear cada centímetro de su maldita anatomía - Jake rió en son de burla, indicando que solo era una broma lo que me había dicho. 
- Eres grandiosamente estúpido, hermano.- Le regale una sonrisa amigable y una risa comprensiva.

Jake ha sido mi mejor amigo desde la preparatoria, sería ilógico que no me haga reír con sus idioteces.
Pasamos una hora mas en el auto y por fin llegamos a nuestro destino, una zona arqueológica ubicada en medio de la reserva y poco explorada. El lugar perfecto para iniciar nuestro viaje.

Bajamos de la camioneta, Jake saco las mochilas de la cajuela y yo los víveres.

- Christian, ¿te parece si empezamos por aquel montículo? - Fue muy extraño que me pidiera eso, por lo regular seguimos nuestro mapa previamente trazado.
- ¿Qué hay de especial por ahí Jake, no se supone que seguiremos el mapa? 
- No lo se, creí haber visto algo. De seguro mi mente sin sentido ya comenzó a ver cosas.- Estaba seguro de que era algo mas. Jake nunca se alarmaba o cambiaba las cosas solo así, es tan ordenado que, cambiarle aunque sea un solo detalle lo pone de malas.
- Si te intriga tanto, podemos ir a echar un vistazo. Igual y tu mente no esta tan loca como piensas que esta.
Caminamos en dirección al montículo. Jake se veía inquieto, como si algo de verdad intrigante hubiera captado su atención en ese punto especifico. Nos acercamos lentamente. Las hierbas y hojarasca seca que cubrían el suelo, impedían saber con exactitud que secretos guardaba la tierra debajo de ellas. Y mientras nos acercamos cada vez mas a aquel lugar, un simple descuido. Una sola acción y un segundo de distracción nos llevo a nuestra inmutable decadencia y a un viaje inesperado.

Caímos dentro de una cueva, al pisa un delicado colchón de bellas hojas secas, cubiertas por un manto de flores tan tentadoras que, me hicieron recordar que la muerte puede ser muy hermosa a veces.

Un desgarrante grito se hizo notar en medio del ambiental sonido de la selva. Jake yacía tirado a un lado mio, y el dolor era notorio en su mirada. Yo, por otra parte, me sentía sin aliento. El aire se me fue del cuerpo y mi voz simplemente no salia. No podía hablar y solo escuchaba los lamentos de mi mejor amigo y su mirada que suplicaba por ayuda inmediata.

No recuerdo ni como fue que pude levantarme. Tal vez, mi súper poder se revelo ante nadie en ese momento, porque sentí como un fuego interior recorrió mis músculos y articulo mis extremidades para poder levantarme del suelo húmedo y helado en el cual nos encontrábamos  Solo se que me levante de ahí  con nada mas que un trasero adolorido y medio entumecido.

Cojeando, llegue hasta donde Jake estaba. Pude mirar mas de cerca su rostro, y de verdad se retorcía de de dolor. En ese momento mi estomago sintió estremecerse y la sangre que brotaba del tobillos de Jake me hizo pensar en muchas Frambuesas aplastadas, formando una rica y deliciosa jalea de porquería en su pie.

- No te quedes ahí parado como idiota, ¡AYÚDAME!
- Precisamente eso voy a hacer, pero estoy examinando la situación  No puedo moverte solo así. No se si te fracturaste algo mas, mi querido amigo grandiosamente sabio.
- Esta bien, pre apresúrate. El dolor es insoportable.

Me acerque mas a su pie, al parecer se había dislocado el tobillo y eso era un problema porque, si mis cálculos no nos fallaban, estábamos bajo un claro, en medio de una cueva que no conocemos, y la única salida cercana permanecía inmóvil sobre nosotros, a mas de 10 metros de altura.

Pensé por un momento nuestras opciones. Jake no puede caminar, yo si. La salida mas próxima y por la cual entramos esta a diez metro sobre nosotros. La mochila con el equipo de rapel se quedo en el auto. La única salida es buscar, un camino que nos saque de aquí. Jake dirigió su mirada hacia mi, sabía tan bien como yo cual era la respuesta, pero ambos temíamos decirla.

Nos quedamos mirando y pensando por largo rato, hasta que no soportando mas el silencio, Jake decidió hablar
- Es obvio que debes de dejarme aquí, o de otra forma moriremos ambos.
No supe como reaccionar, sabía que tenia razón. Pero no estaba dispuesto aún a dejarlo solo, a su suerte, mientras buscaba una salida que, ni siquiera estaba seguro de encontrar. Pero el tiempo es Oro, y mientras mas rápido saliéramos de este problema (que en realidad se suponía sería una de las excursiones mas placenteras de nuestras aventuras), mas rápido podría buscar ayuda para Jake.
-Esta bien. Solo deja reviso los alrededores. No te puedo dejar aquí solo, sin antes cerciorarme de que no hay alguna especie de monstruo come humanos, o un dragón de milenario que te quiera devorar por que, sería muy triste tener que ver morir a un animal ancestral por culpa de tu insípido y amargo sabor a bilis.
Jake se rió de mi sarcasmo inapropiado, y eso me dio la fuerza que necesitaba para desaparecer de su vista. Comencé a explorar el lugar, por suerte yo tenia una linterna y dos pares de baterías nuevas en la mochila que amortiguo mi caída. La cueva estaba llena de patrones en el techo y estacas en la tierra. Estalactitas y Estalagmitas la adornaban por donde quiera que Yo volteara a ver. No visualice presencia alguna de una amenaza lo bastante fuerte, como para no dejar a Jake, así que volví hacia donde se encontraba y le comunique la noticia. Me despedí con una promesa de su presencia y emprendí e viaje por aquel laberinto subterráneo.

Ya antes había explorado cuevas, junto con mi tío, quien es Espeleologo de una de las Universidades mas prestigiosas de México. Fue en Veracruz, cuando tenia solo 17 años. Fue la primera y ultima vez que hice algo así, pero lo aprendido con mi tío, me sirvió bastante esta vez. No tenia casco, lo cual me exponía demasiado a los bastos peligros que me observaban con ojos amenazadores desde arriba.

Camine al rededor de dos horas. Ya estaba muy lejos de Jake y la oscuridad total me abrigaba con su manto de soledad. Solo escuchaba mi respiración y el débil goteo del agua  a la distancia, avisándome, advirtiendo de que el peligro de caer en un pozo o un río subterráneo estaba latente, a la espera de que diera un paso incierto y me tragara con su feroz deseo de matar.

Todos mis sentidos estaban tan agudos que, podía oír como la arena debajo de mis zapatos crujía con cada paso. Con la lampara veía yo mi aliento frente a mi cara, era como un velo sombrío o un fantasma que emanaba de mi cuerpo. Mi alma escapando de su prisión por un instante.

Me encontraba tan distraído en mi propio mundo que, apenas pude sentir su presencia en mi nuca. Dos dedos palparon mi espalda y mi cuerpo, o algún tipo de sexto sentido que desconocía  estremeció todo mi ser y azoto mi cabeza para hacerme entender que no estaba solo en aquella recamara de roca y lodo. Voltee de inmediato, y en seguida pude ver lo que me toco, era como el lodo. Su piel reflejaba la tierra y en su cabeza reposaba un inmenso conjunto de plumas de colores muertos. Negro, gris, rojo y café  Su mirada penetraba cada hebra de mi cuerpo, cada célula de mi organismo  Mis huesos sintieron frío y mi cabello cobro vida, al momento de sentir un choque eléctrico; como cuando Frankenstein fue creado una noche de Luna. Sus ojos reflejaban fuego, una llama débil dentro su mirada y su voz, su voz era como escuchar miles de instrumentos armonizados de tal forma que, tanto la música como las palabras se unían para crear un idioma casi humano.
- Que haces aquí. ESTE ES UN LUGAR SAGRADO.
La sola presencia de lo que sea que me hablaba, hizo que el frió de la cueva comenzara a desaparecer y en su lugar, todo empezaba a secarse, como si el calor de sus ojos de verdad quemaran todo.
- Estoy aquí por accidente, y solo quiero salir. Busco una entrada o una salida a este lugar, necesito salvar a mi amigo que esta en algún punto de este perdido desierto subterráneo.
- Estas invadiendo mis dominios. Hace ya muchas eras que ningún mortal pisaba estas tierras olvidadas. ¡QUE HACES AQUÍ!
Su voz aumentaba cada vez mas de nivel, y el miedo comenzó a hacerse mi amigo poco a poco. Aquel ser extraño, que tenia la cara pintada de forma tan extravagante  me recordó al Halloween. Cuando los niños se visten de calaveras y se pintan los ojos de negro para aparentar tenerlos huecos, solo que este lo que sea, de verdad tenia hundidos los ojos y su aparente "pintura", en realidad parecía mas parte de su piel que un simple maquillaje.

- Ya te he dicho, estoy buscando una salida. No pretendo violar la santidad de tus dominios, solo quiero salir de aquí.
- Pues, si lo que quieres es irte de aquí  estas perdido. Nadie escapa del inframundo una vez que haya entrado. ¡NADIE!

De repente, comenzaron a salir de la nada cientos de luces amarillas y tras ellas cabezas decapitadas, con los ojos saltones y sin vida. Gelatinosos y viscosos. Un lamento aterrador invadió todo el ambiente y mi miedo se hizo notar. Estaba pasmado, asustado, anonadado y todo aquello que termine con "ado".

- ¿Quién o qué eres tu?

- Soy el que soy. Muchos me llaman de diferentes formas, para algunos soy el Hades, para otros soy La Muerte. Pero en realidad, mi verdadero yo esta sucumbido para mi propio conocimiento. Soy el final de toda vida.
Soy el señor del Inframundo.

jueves, 1 de noviembre de 2012

Cantar al Amor




Cantar del Amor suena sencillo
Cuando la voz expresa en todos sus sentidos
Las sensaciones con el mas cálido brillo
Y con rayos que alimentan tus latidos


Pero cantar al Amor es mas que solo eso
Cantar al amor significa tener en cuenta un beso
Un beso en el alma, que te haga soñar
Un sueño despierto, que te haga volar


Mas yo nunca me he enamorado
Desconozco lo que esto signifique
Mi vida permanece en color morado
Y mi mente intenta hacer que lo decodifique

No se que es amar a un ser extraño
Necesito saberlo pronto
Algo nuevo se acerca este año
Y mi tiempo se vuelve mas corto

Necesito saber del amor
Del amor a un ser diferente
Necesito saber del calor
Que te causa amar mas que con la mente


Para vivir una vida diferente
En un momento de Magia
Cantando frente a la gente
La canción que interprete con gracia.

Que Maravillosa es la Vida




Duerme princesa, duerme tranquila
Viaja a tu mundo, ya no estés cautiva
No desesperes de la noche eterna
Ni del mañana incierto

No te angusties del viaje de mañana
Ni del regreso del ayer

Cubre tu rostro con el velo de la inocencia
Recorre las calles con tu cabello suelto
Deja que el mundo vea tu conciencia
Baila y corre con su cuerpo esbelto

Ignora las espinas de la vida
Tu eres mi rosa preferida
En ti encuentro la paz interna
Pues contigo mi vida es eterna

Que maravillosa es la vida
Ahora que tu estas en mi mundo
Que grandiosa es la huida
Que emprendemos de un viaje rotundo

Este es mi regalo
Esta es tu canción
Las notas mi pasión
Con la letra de mi corazón

Y puedes decirle a todo mundo
Que esta es tu canción
Tal vez sientas que me hundo
En tu mundo de ilusión

Pero espero no te importe
Que lo exprese con palabras
Pero espero no te importe
Que lo diga con tantas ganas

"¡Que maravillosa es mi vida
Ahora que ti estas mi mundo!"